martes, 17 de mayo de 2011

Facebook y su potencialidad para afianzar comunidades!

Ensayo sobre facebook

“La potencialidad de Facebook para crear o afianzar comunidades”

la constitución de las comunidades en Facebook es indisoluble de la arquitectura y de la creación del perfil en la red social. Esta primera aclaración, sin embargo, no debería impedirme focalizarme en la formación de comunidades ¿se puede considerar a la formación de las comunidades como el tercer momento de un usuario en la red, esto es, luego de crear mi perfil dentro de la arquitectura? En tal caso, nuestro objeto de estudio estaría supeditado a estas dos instancias anteriores, a estas dos estructuras estructurantes. Esto no quiere decir que la creación de las comunidades sea una simple sumatoria de perfiles dentro de una arquitectura que permita esto. Lo que expongo es: para entrar a cualquier juego uno debe primero presentarse como jugador (ser jugador) y aceptar ciertas reglas dentro de una sistema cerrado.
Antes de continuar la línea de análisis que planteo, veamos: ¿Por dónde entrar (le) a Facebook? Facebook es una red social. La definición de red social propuesta por Boyd y Ellison1 consta de 3 características: (a) el usuario construye un perfil público o semi-público dentro de los límites del sistema (b) articula una lista de usuarios con los que comparte su perfil y con los que está conectado y (c) es capaz de ver la lista de contactos de sus contactos y viceversa. Una primera observación nos estaría indicando que lo que define a la red social es el tratamiento del perfil por parte de la red; o sea, cómo Facebook permite que los usuarios dispongan de los perfiles de los demás.
Creo pertinente, entonces, comenzar con algunas observaciones del perfil (y con esto la arquitectura de Facebook también). Facebook pone como condición pertenecer a su red para poder ver los perfiles de los usuarios que componen esta red. Uno debe crear un perfil para poder ver otros. Esto es el primer paso y no es menor. Otras redes sociales permiten que cualquier persona externa a la red tener acceso a los perfiles creados (como por ejemplo: myspace.com), otras dan este derecho a los usuarios que paguen una cuota. Lo interesante de todo esto es que en todos estos tipos de manejo del perfil se va delimitando la identidad del usuario. Las redes sociales han encontrado de la forma de ayudar a componer identidades virtuales de una manera muy ingeniosa. Los estudios de la comunicación (los modelos psicosociológicos) nos indican que el “yo” se construye en la interacción con el “otro”. Es imposible pensar la construcción de una identidad sin el otro, sin la mirada del otro (no hay más que recordar la fase del espejo en Lacan). Principalmente, lo que hace la arquitectura de Facebook es que cualquier “amigo” vea mi perfil, vea quienes son mis “amigos” y qué aportes hacen. De hecho, la página con la que inicia un perfil estándar en Facebook es un mosaico de noticias sobre otras personas (qué piensan, qué hacen, dónde se han unido, qué test han hecho etc.) y si uno investiga en otros usuarios, encontrará interlocuciones del usuario con otros, recientes amistades etc. Los otros son indispensables para mi identidad en Facebook.
“Los otros” nos introduce al tema de las comunidades. Veamos la definición de Florencia Morado de comunidad virtual. Ella dice “Una Comunidad Virtual es un nuevo universo, paralelo, creado y sustentado a partir del mundo de las computadoras. Un nuevo lugar de desarrollo de la cultura humana bajo del signo de la tecnología.”2 Pienso ¿cómo se crea este nuevo universo? ¿Qué quiere decir “sustentado a partir del mundo de las computadoras”? Según Levy, “Cuando una persona, una colectividad, un acto, una información se virtualizan, se colocan “fuera de ahí”, se desterritorializan.”3
Des- territorialización, Tierra, tierra, da lo mismo: la idea sería un nuevo mundo o un nuevo espacio. Muchos de los términos utilizados en los estudios sobre estas plataformas nos dan la idea de una creación original, una nueva oportunidad. Retomando la cuestión de identidad expuesta más arriba: si me construyo en la interacción (en la acción con los otros) y Facebook plantea nuevo tipo de interacciones, el entimema resulta en “Facebook construye nuevos tipos de identidades” ¿Es exagerado proponer que Facebook construye un nuevo mundo, con nuevas interacciones, con una nueva identidad para cada persona?
Es importante entender el fenómeno de Facebook (como red social) como particular de una clase social en cierto contexto histórico-económico. Claro que esto llevaría un análisis mucho más costoso, laborioso y exhaustivo. Pero, veamos esto semióticamente, que es más barato. Una comunidad no es una sociedad. Una sociedad es lucha de clases, diferencias, discusiones y guerra. Una comunidad es armonía, pluralidad de ideas, comunicación y paz. Una comunidad en Internet puede ser, en muchas ocasiones, la eliminación de una clase social (situación que efectivamente se da; por restricciones varias – culturales y económicas – este medio no es para clases populares). Se ha escrito sobre la Sociedad Red4, pero para designar a un periodo socio-histórico más que una forma de interacción en Internet, e inclusive podría decir que el autor adscribiría al uso de la palabra Sociedad bajo las connotaciones que arriesgué más arriba. Creo que podría pensarse que las comunidades en Internet representan una parcialidad de nuestra sociedad, que distan de la realidad argentina actual (si se quiere “actual” en contraposición a “virtual”, pero no sé si hace sentido). Inclusive, una multitud en Internet es una Multitud Inteligente, según Rheingold Howard (y acá pido permiso para abusar del género ensayístico e improvisar sobre un concepto que solo toco de oído). Rheingold en una entrevista5 habla sobre los dos conceptos: “Smart” en inglés, explica el autor, tiene dos posibles acepciones: inteligencia o técnicamente mejorada y “Mob” que quiere decir multitudes, pero también multitudes con una fuerte connotación negativa – o como dice el autor, peligrosa - debido a que se puede usar para designar a la mafia o a algunas aglomeraciones fascistas. Smart Mobs es el título de uno de los libros de este autor. Rheingold dice que eligió el título por la ambigüedad que proponía el término “mob”, o sea que la posibilidad de comunicación a lo largo del tiempo en Internet también puede ser utilizada por terroristas o agrupaciones criminales. Sin embargo, creo que es interesante el título en general. Los teóricos de las multitudes de principio de siglo XX - Ramos Mejía, José Ingenieros, Ortega y Gasset etcétera - fueron siempre despectivos en su modo de percibir su objeto de estudio. Ahora las masas virtuales son inteligentes ¿Por qué ahora? ¿Qué las hace ser Inteligentes? ¿El medio Internet? Parece un término demasiado importante para designar al medio, además de una especie de fetichización de tecnología, una perspectiva tecnófila ¿La inteligencia viene de la capacidad de juntarse libremente? ¿En los objetivos está la inteligencia? ¿Antes no había objetivos razonables en las concentraciones?
Pero me estoy alejando de la premisa inicial: cuál es la potencialidad que tiene Facebook para crear o afianzar comunidades. Todo lo que expuse anteriormente era sobre comunidades virtuales. La premisa dada implica que una entre el entre los mundos virtuales y los reales no existe frontera alguna. Creo que la misma definición de Comunidad Virtual, como expuesta anteriormente, nos marca esta frontera. Sin embargo esa es sólo la definición de Florencia Morado. Como todo (en) Facebook, los conceptos son borrosos y es difícil marcar límites. Como la teoría del jueves próximo en U. Eco que expone en Apocalípticos e Integrados.

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